Excesos

Por donde lo mire es una época de excesos.
Excesos, excesos, excesos y más excesos.
Excesos de indecisión, de duda y contradicción.
Excesos de rayes, de impulsos, locura y descontrol.

Excesos de pensar, hablar con esas voces que especulan sin escuchar al corazón.
Excesos de extremos que hacen subir y bajar de un solo tirón.
Excesos de silencios, de hablar de más, de enroscarse y de irse a la mera simplicidad.
Excesos de ser yo y no yo en circunstancias que ya ni sé yo.

Excesos de ser como larvas, de estar cómodos, ignorando todo y sentados en un futón.
Excesos de gula, de desperdicios y mala administración y, mientras tanto, millones de pobres con hambre gritando por un poco de compasión.
Excesos de enfrentamientos, de huidas, de éxitos y de desilusión.
Exceso de todo junto, un poco mucho de confusión y sin razón ¿pero todo con sentimiento y pasión? Ojalá...

Excesos de creer, afirmar, excusarse y/o conformarse, con que todo sucede por una razón.
Y excesos de gente mala leche y de una nueva era digital que revoluciona la comunicación incomunicando cada vez más, llevando a la ausencia de conexión total, solos unos pocos la saben aprovechar.

Y excesos de todo tipo de música y, por suerte, sigue en lo alto el reggae y el rock and roll y, en estos tiempos de autodestrucción un poco de masoquismo puro con los sinceros y melancólicos Sabina y Charly, y con otros cuantos más solitarios y nostálgicos grupos o cantautores.

Y así pasan los días y pasan las horas, y sigo viendo excesos que abundan por la zona.

Algunos me hablan y seducen y, andando por caminos turbulentos y otros más tranquilos y serenos, me dejo llevar por ellos yo sola.

Y excesos de alcohol, de borracheras sin recuerdos por elección o no, de maconha de la buena, de flores de la mera naturaleza, de esas que te vuelan la cabeza, y llegando hasta el cielo aparecen sonriendo mis abuelas, Nelson Mandela, el Che, y la Madre Teresa que nos mira de reojo pero riendo picara desde su nube pasajera.

Y así, todos escuchamos un mix de melodías de John, Freddy y Bob… y así todos juntos seguimos viajando por Saturno y Plutón…

Y Excesos de no vos, de no vos, de no vos…de no vos.
Excesos de mi cuerpo con mis otros yo. Así ya acostumbrado, sin ganas ni necesidad de nada más, ni siquiera de un poco de acción fatal, (exceso de extremismo puro utilicé acá) y es que ya basta con el sólo exceso por el gusto de mis manos causando excitación y algo más...
Y es que...es mi compañía conmigo misma mi mayor exceso mortal.

Excesos de escribir mierda pura-es solo una expresión- llena de idealismo e imaginación, de sueños puros sin concreción... de eso culpable soy.
Excesos de injusticias: de violencia, enfermedades, accidentes, muertes y contaminación, eso es más que una expresión y de eso culpable somos todos creo yo... y,a veces,no.

¿Exceso de escupir todo junto sin una línea alguna, quizás?

Excesos de la vida misma que suceden cada vez más y me persiguen sin parar.